martes, 3 de febrero de 2009

Belén Reyes

Una tarde rara (fría, de niebla), una entrada de octubre de un blog al que llegué gracias a Enrique y que hacía meses que no visitaba y, ¡zas!, una poeta me deslumbra.

Con todos vosotros, Belén Reyes:

Debería existir algún seguro
igual que los de vida, o los del coche,
o los de a todo riesgo.

Debería haber:
seguro de que llama,
seguro de que siente,
seguro de que me ama,
seguro de que vuelve.

(¿Sería un poco raro asegurar
sus manos en mi pecho,
sus ojos en mis ojos,
su voz en mi silencio?)

Si Dios es abogado
¡y el mejor!
Si tiene miles de oficinas en el cielo,
no sé cómo no se pone
y cualquier día
se lía a hacer seguros.
¡Fuera el miedo!

El miedo a un siniestro total
si nos chocamos,
el miedo a que se queme nuestro pecho,
el miedo a que nos roben la esperanza,
el miedo a tener miedo.

El miedo a una riada de tristeza,
el miedo a que se muera un sentimiento,
el miedo a que te den un golpe bajo,
el miedo a que te timen con un beso.

(¿Sería un poco raro asegurar
una muerte digna,
un manantial de amor,
una galería de recuerdos?)

Debería haber algún seguro
que cubriera todos estos riesgos.

7 comentarios:

  1. gracias por el poema, berna, es precioso

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  2. Hermoso poema.

    Besos,

    Gloria

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  3. gracias por abrirme los ojos a otros mundos.

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  4. Qué suerte haber ayudado a mi hermana china, Berna, a descubrir a Belén Reyes, porque ahora ella, desde Katmandú, me lo ha redescubierto a mí. Gracias.

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  5. Sí, qué raro es todo, ¿no? Fue toda una experiencia la otra tarde, aquí, con el valle de Katmandú a nuestros pies, Rafael y yo, cada uno en su ordenador, saqueando Google y leyéndonos el uno al otro, fascinados, los poemas de esta mujer.

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  6. William Boyd Morán23 de marzo de 2012, 19:19

    Por esas cosas raras que tiene la vida, buscaba en internet poesía contemporánea y tropecé con los versos de Belén Reyes. A la distancia, desde Piura - Perú mis más sinceras felicitaciones poesía hechura de mujer.

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